En nuestro diseños intentamos siempre que haya algún elemento central, que vertebre el proyecto y que le dé sentido. En esta terraza de gran tamaño el elemento fue un conjunto formado por macetas y bancos que generaban la nueva distribución espacial. El objetivo era obtener una terraza mucho más habitable, con espacios habitables y acogedores. Utilizamos el mobiliario que ya tenían nuestros clientes para conseguir estos espacios.
En la nueva distribución, el pequeño espacio inferior (el de más uso), fue determinante. Así, desde este punto intentamos conseguir la máxima sensación de espacio verde, utilizando el mínimo de especies y macetas para no cargar de peso esta terraza.
La aparición de un árbol (Liquidambar styraciflua) y la casita de madera, nos dieron un crecimiento en vertical, ocupando un espacio elevado y que nos permitía juntar visualmente la vegetación más baja con los árboles de gran tamaño que se encontraban fuera de la terraza, pero de gran importancia para la sensación de confort generada dentro de la misma ("el jardín prestado")